La flor de pascua, también conocida como poinsettia, es una planta popular en Navidad, pero puede representar un riesgo para los gatos si la ingieren. A pesar de su mala reputación, estudios realizados tanto por la Sociedad Estadounidense para la Prevención de la Crueldad Animal (ASPCA) como por el Servicio Británico de Información Veterinaria sobre Toxicología han demostrado que, en la mayoría de los casos, las ingestiones de esta planta por gatos provocan síntomas leves o moderados.
Aunque siempre se ha considerado peligrosa, la flor de pascua ha sido objeto de exageración en cuanto a su toxicidad para los felinos. Los síntomas adversos, como la irritación gastrointestinal, suelen ser temporales y autolimitantes y rara vez, causan problemas graves. A pesar de ello, no se debe subestimar su potencial para causar molestias a los gatos.
➡️ ¿Por qué debemos tener cuidado igualmente?
La savia lechosa de la flor de pascua contiene compuestos químicos que, de ser ingeridos por tu gato, puede causarle irritación gastrointestinal. Los síntomas comunes de la ingestión de esta planta incluyen babeo excesivo, vómitos y diarrea debido a su efecto irritante sobre las membranas mucosas. En algunos casos también puede provocar irritación en la piel.
➡️ ¿Qué hacer si tu gato ha ingerido flor de pascua?
Si sospechas que tu gato ha ingerido esta planta, es importante contactar con tu veterinario cuanto antes. Dependiendo de la cantidad ingerida y la reacción del gato, el veterinario puede recomendar inducir el vómito, administrar carbón activado o proporcionar cuidados adicionales.
➡️ ¿Cómo mantener a tu gato seguro durante las festividades?
✅ Coloca la flor de pascua fuera del alcance de tu gato.
✅ Considera usar plantas
alternativas seguras para tu hogar (sobre todo si tu gato gusta de morderarlas)
✅ Observa cualquier comportamiento inusual en tu gato y busca atención veterinaria si es necesario.